Oh, niña
al conocerte eras dolor
y eras melancolía.
Me dejaste cuidarte,
me dejaste hacerte florecer.
Oh, mi niña,
eras pobre
yo era pobre
pero qué riqueza era el querernos.
¿Sabes lo difícil que es amar a alguien con dinero?
desconfían de todo
siempre se están defendiendo
es un peligro, un riesgo,
poner en la piel
la flor del sentimiento.
Pero tú no tenías nada
yo tampoco
sólo libros
ganas de leer
de escribir
y nos vimos a los ojos
y entonces
nos dio por vivir.
Ah, miralos a todos,
quieren ganar
quieren acumular
quieren que nadie los joda
sufrieron una vez
hace ya muchas veces
y ahí les terminó la vida
el resto es temor y huida.
Pero mi amor,
mi niña,
míranos
tenemos tan poco
que nos tenemos el uno al otro
tú ahí, sentada,
dedicándome ese poemario
que estás por enviar
y que seguro vamos a perder
porque los concursos son corruptos
como todo en este país
pero igual
cada uno de esos poemas
los escribiste para mí
y me dan ganas de llorar
de besarte
me hace pensar en cuando te enfermas y te cuido
en mis trabajos de mierda
en nuestra pobreza
y en que no importa que no tengamos nada
porque al ver tus ojos, niña mía,
en esa mirada me siento
el hombre más afortunado del mundo.
Que se vayan a la mierda,
todas las mujeres
con todas sus riquezas
con todos sus poderes
yo te tengo a ti
tengo la dicha de cuidarte
eres mejor que todas
porque tú tienes el coraje de entregarte
a este hombre que te ama
que siempre va a cuidarte.
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