La mayoría de los hombres van a morirse sin saber lo que es que una mujer los adore.
Que los premie por ser el mejor hombre que ha tenido en su vida, esa historia de amor que la ha marcado y que no podrá borrársele nunca.
Que le encante hacer cosas para complacerte.
Que sea tu admiradora número uno.
Que seas su primera opción.
Que cocine para ti sin que se lo pidas, sólo porque le encanta complacerte.
Que cuando termines de comer te quiera recoger los platos.
Que adore servirte, ser sumisa, ser liderada por ti.
Que se sienta segura.
Que se sienta protegida.
Que seas una prioridad para ella.
Que esté enamorada de ti y no tenga la más mínima duda de ello.
Que se excite sólo con que tú truenes los dedos.
Que le excite ser dominada,
que tu masculinidad la enloquezca.
La mayoría de los hombres van a morir
sin llegar a ser ese hombre para el que están destinados a ser
ese hombre para el que ella fue diseñada para amar.
No está en las palabras
no tiene que ver con decirlo
ambos lo sienten
a ambos los embriaga la naturaleza que los hace unirse.
La mayoría de los hombres no van a saber lo que es que una mujer no tenga problemas en compartirlos,
porque prefiere compartir al mejor que ser la dueña de uno más del montón.
No van a saber lo que es que las mujeres con novios los busquen a escondidas.
La mayoría de los hombres no van a saber lo que es que la mujer que los adora les traiga a sus amigas.
Para que hagan un trío,
porque ella adora complacerte
porque ella siente la necesidad de mantenerte feliz
ella siente que nació para dártelo todo
y tú sientes que lo mereces.
La mayoría de los hombres van a morir sin saber lo que es tener el corazón de una mujer.
Que ella no te pare de pensar.
Que ella sienta que no puede tener suficiente de ti.
La mayoría de los hombres son mediocres
y se van a conformar
con un afecto mediocre
y así van a morirse.
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