viernes, 31 de mayo de 2019

Arcoíris

Está lloviendo
desnúdate
y ven
tengo un arcoíris para ti
no necesito pedirlo
lo sé
es lo que quieres
y yo también.

Me gusta cuando me muerdes el verde,
y pasas tu lengua por mi amarillo.
Cuando gimes encima de mi rojo
y cuando se entierra mi azul
en tu tierra blanda y mojada.

Me gusta así,
esa sonrisa tuya de sol
mírame hoy
para que llueva todos los días
sonríe así
para que no se me acaben los arcoíris
que de tu violeta se llenan mis poemas
que cuando te muerdo el cuello
es como encontrar el tesoro
que yace del otro lado.

domingo, 26 de mayo de 2019

Mi primer amor

Se llamaba Maria Fernanda, porque no hay otra manera de empezar la vida.

Yo era el chico malo, rebelde, arrogante, contestaba a los profesores, me agarraba a golpes con todo el mundo, los hombres me temían y las mujeres me deseaban, excepto cuando las trataba de forma especial.

Pero luego me metí en problemas con el lider de la pandilla a la que pertenecía, por problemas de faldas, por supuesto, y me vi recluido en mi propia casa, sin amigos, sin un grupo.

Sin embardo mi confinamiento solitario no estuvo tan solo, encontré los libros, y con ellos, por primera vez desde que salí del vientre de mi madre mi vida tuvo un sentido: la palabra.

Tenía metas, dejé de vestirme como un delincuente, llamar la atención ya no era necesario, mas no obstante, mi reputación de chico malo no se fue, y el origen de ser Raga era esa mezcla de ser deseado por mi arrogancia y ser admirado por mi inteligencia y mi integridad.

Trataba a todas las mujeres de la única forma a la que responden positivamente: como putas cordiales. No me acostaba con ellas, porque no tenía la destreza de las proezas alcanzadas: era virgen.

Maria Fernanda y yo nos deseábamos sin saber por qué, nunca nos buscamos, era su ároma lo que me llevó a abrazarla por la espalda sin motivo aquel día en el que esa niña buena no se fue puntual a su casa; y era mi fuerza la que le hacía brillar su rostro y rechazar a todos sus admiradores para abrirle paso a ese muchacho extraño que terminaría pasando a la historia con el nombre de Victor Hugo Raga.

Fuimos al cine en grupo, ella se quiso sentar conmigo, no me dejó alejarme, a pesar de que era lo que quería hacer, ya que había notado el interés de un chamo del grupo en ella. Para mí ella era una chama más, para él, ella era una princesa inalcanzable.

Pero las mujeres responden a lo que responden, no a lo que quieren creer.

Y entonces Maria se sentó conmigo, no dejó que la besara, y yo estaba aliviado, porque no tenía idea de lo que estaba haciendo.

14 años, ambos teníamos 14 años, hoy ha pasado tanto tiempo, y me da ternura verme a mí mismo después de cientos de mujeres y cientos de libros que han pasado por mi vida.

Ella se enojará, pero no recuerdo cuándo nos besamos, sin embargo recuerdo con detalles delicioso la primera vez que se trago mi pene.

La hice mía un día de abril, y hasta el sol de hoy ningún otro hombre ha tenido la fuerza para poseerla.

Si Venezuela no se hubiera hecho pedazos, hoy sería un padre de familia de día y un Joaquín Sabina de noche.

Duramos 5 años juntos, fui su dueño, su protector y la envidia de todas sus amigas.

Me pertenecía, sólo tenía ojos para mí y en la cama la había entrenado para ser mi perfecta puta.

Aquí es cuando todos empiezan a odiarme, porque les dejo en claro que un hombre puede tener todo lo que quiera de una mujer, su alma y su cuerpo, siempre y cuando tenga el coraje de vivir una vida de grandeza.

Yo me acostaba con otras y ella lloraba, y luego venía a que me la cogiera mientras me decía que por qué, y se corría de placer y de dolor al describirle sus mayores temores mientras mi pene la abría como si fuese un hacha cortando en dos la mar congelada.

Era puro instinto y nada de técnica, ella era mi mujer, me pertenecía y la adoraba, nunca nadie la consintió tanto, ni la llenó de esos dolores secretos que a las mujeres tanto les encantan.

Y hoy estoy aquí, honrándola en mis recuerdos, un poquito, no mucho, por mero placer de escribir.

Imagínate (o en el tobogán)

Imagínate
que eres una niña
muy pequeñita
como la niña que fuiste
pero más feliz
con un vestido blanco
con unos zapatos muy bonitos
y que te subes a un tobogán
y te lanzas sin miedo
porque abajo
esperándote
estoy yo.

Imagínate
que vas a la escuela
y que en la lonchera llevas
todos los besos
que te preparé con amor
para que te los comas en el recreo.

Pintas en clase
y de tus crayones
salen mariposas
mientras me dibujas
y dices:
amo a mi papito.

Imagínate
nada malo te pasa
pero si ocurre
allí estaré yo
para besar tus rodillas
y sana sana
y secarte las lágrimas
y vamos a los columpios
que la vida sigue
y tu papito te ama.

viernes, 24 de mayo de 2019

Conmigo conocerás la primavera

Conmigo conocerás la primavera
y la fuerza de un hombre.

No, no serás la mujer independiente, empoderada y libre, no te acostarás con otros y lo presumirás en redes sociales,
y tampoco dirás que tenemos una relación igualitaria, para ocultar el hecho de que no soy el hombre
que querías, sino el chico bueno que evitó que llegaras a vieja, con el corazón roto y sola.

Te lo digo,
conmigo conoceras la furia de la flor
y la muerte del poema.

Yo soy un hombre,
deseado y odiado,
admirado e imitado.

Pero soy un hombre como ningún otro
dueño
de su lugar en esta tierra.

Conmigo conoceras la primavera y la poesía,
no seré tu amor libre
seré tu dueño
el que te proteja cada noche
el que asesina a cualquiera
que trate de hacerte daño
tal vez no el hombre que las mujeres quieren
pero sin duda el hombre
que tú necesitas.

miércoles, 22 de mayo de 2019

Desde el cielo

Aún me dueles
y me siento estúpido
porque me dueles
y no sé por qué
no es que quiera estar contigo
es que pienso en ti
y de pronto
el pensamiento se nubla
un trueno resplandece en mi alma
y desde el cielo
todo empieza a doler.

lunes, 20 de mayo de 2019

¿Te das cuenta de que te extraño?

¿Te das cuenta de que te extraño?
De que veo el amor que le pones a las flores, a las plantas,
y es como si la primavera naciera del silencio orquestado por tus manos.

Es tan bello todo lo que haces
es tan bello
porque todo lo que haces
es cuidar y dar amor.

Eres tan hermosa
si lo femenino tuviese un rostro
sería la pureza de tus ojos
duermes con la furia del mar que acaba de ser tempestad
y yo acaricio tu pelo
y la felicidad me huele a sal.

Nunca falta otra mujer,
alguna que como la luna
inquiete tus aguas
pero en las noches de luna llena
cuando nadie me ve
en ese silencio sin ideas
en donde no me reconocen
ni siquiera mis poemas
en esa
la soledad más bella
tú estás conmigo
abrazada como siempre a la fuerza de mis brazos
demandando con tu ternura
que te cuide
que te ame
que nunca me vaya de tu lado.

domingo, 19 de mayo de 2019

El Dios de la salsa (Poema a Ismael Rivera)

Tu rompes la clave
y también el corazón
y cuando uno se halla abierto
y desnudo
en el aire
metes un verso
y dos
y es como volver a la patria
y es como volver a nacer.

Oh, mi rey Maelo
qué bello es este son
que usted me pone
a llorar y a bailar
cómo me hace renacer.

Que nadie lo olvide
que la poesía sepa
que se llamaba Ismael.

Era niño,
jugaba con palos y componía en latas
era pobre
y no sirvió al ejercito gringo
por no saber inglés
que se me hacen versos los labios
cuando en este poema
canto al son de Ismael
de Ismael Rivera
A la la eh

Y es que de las tumbas quiero irme
porque las tumbas son pa' los muertos
y de muerto no tengo nah.

Cualquiera que te escuche
a Puerto Rico vuelve
un pana me escuchó contigo
más de 50 años después de que te has ido
me dijo
"se nota que eres boricua"
le dije "soy venezolano"

¿Y sabes lo que me dijo?
Maelo
¿Sabes lo que me dijo?
Me dijo "Nah, somos lo mismo"

Ay, pero que son más bello,
¿cuándo saldré de esta prisión
que me tortura mi corazón?
Si sigo aquí, enloqueceré.

Monotonia monotonia
cruel dolor
si sigo aquí
enloqueceré...

Pero al igual que tú
salí poeta
salí rebelde
y no puedo dejar de pensar
en las caras lindas
las caras lindas de mi gente bella
que cuando pasan
frente a mí se alegran

me sacas la cara más linda y más negra de mi corazón
Ay, Maelo,
somos lo mismo
por eso vivo orgulloso
del color del que me pintas
porque salgo a la vida
porque salgo a la muerte
y aquí llevo dentro de mí
tu llanto
tu sonido
tu belleza y tu poesía

Porque en tu voz
están las caras lindas
(y qué lindas son)
las caras lindas de mi gente negra.

Porque qué inmenso
es ser dueño
de la tierra y la mujer.

sábado, 18 de mayo de 2019

Esa soledad que ya no es mía

No puedo despedirme de ti
sin dolor
sin pensar en que las últimas palabras
que pronunciaste
eran las últimas
que conocería esta historia.

Sí, te quise más de lo que hiciste tú.
Porque yo necesitaba quererte mucho más.
Porque yo soy mayor que tú,
y he venido extrañando
y estando solo
por más tiempo.

Pienso en tus historias,
en cada vez que te sentabas en mis piernas
y llorabas entre mis brazos.

En lo fácil
que era salvarnos
de nuestro pasado
de nuestros corazones fracturados
cuando nos juntamos.

Pero debo irme,
debo irme porque peor es quedarme con una persona
que no me respete
eres tierna
pero también violenta
estás jodida
hay tantas cosas de ti
que no puedo aceptar
como cosas de ti
que por hermosas
no puedo olvidar.

¿Diré tu nombre?
No,
yo no hago eso en los poemas.
La verdad,
ni siquiera
te llamo por tu nombre
cuando te recuerdo
y vaya que te pienso.

No te mentí,
cuando te dije
que se sentía extraño
pero bonito
estar con alguien
después de pasar
tanto tiempo solo.

Acompañado,
pero solo.

Y te metiste en esos rincones,
que eran sólo míos,
porque eras tan auténtica
que no me diste miedo.

Pero tenías que ser malcriada,
y faltarme el respeto.

Está bien, cariño.
Prefiero perderte
que tragarme
tus maltratos.

Sí,
voy a quererte,
hija de puta.

Vas a llenar siempre
un pedacito de mí
con nuestra historia
que ahora llega a su fin
y que solo escribo
porque tú no conoces este idioma.

En los márgenes de mi poema

Nuestros caminos se separaron,
pero no temas,
este poema no es para decir
que te odio.
Y no te espantes,
tampoco es para decirte que me arrepiento.

Te pienso y te recuerdo
no sin pensar y recordar
al mismo tiempo
a otras mujeres
que al igual que tú
perdí.

Creo en la libertad
aunque no crea en los sentimientos,
la pasamos tan bien,
nuestra historia es una historia
que pudo haber sido mucho
pero al final dejó de ser
y dejó se ser tan pronto.

Diría que se te atravesaron otras historias más fuertes
encima de la mía
pero yo sé que ya
estabas rota
antes de empezar a escribirnos
lo sé,
pude verlo,
porque yo he estado tanto tiempo roto
que sé darme cuenta
cuando un corazón me ama
con la violencia
de intentar
de sobrevivir
de juntar
con la humedad entre tus piernas
los pedazos rotos con los que sientes.

La historia que me contaste,
la historia sobre quién eres
de la mujer noble
libre y fascinante
solitaria y autosuficiente
era tan bonita
pero yo no la creí nada
he estado en tantos infiernos
mis ojos han visto tanto sufrimiento
que pude ver entre líneas
y las anotaciones en los
márgenes.

Eres hermosa,
noble,
egoísta.

No debimos pasar
pasarnos
pero el deseo fue demasiado fuerte
para no juntarnos
a pesar de que predicamos
cada uno
en el bando de todo lo que odiamos.

Fuimos enemigos intimos,
por eso nos desnudamos.
Nunca fuimos amigos
por eso

nos alejamos.

No pude conquistarte,
no pudiste admirarme,
o tal vez sí,
pero ambos nos dimos cuenta
de que no éramos tinta
para la misma página.

Adiós, cariño,
te veré sufrir,
te veré gozar
pero sólo en mi corazón:
porque no te veré de nuevo.

viernes, 17 de mayo de 2019

Si no te hubieras ido

Si hubiesemos tenido
los hijos que quise tener contigo
les diría lo orgulloso que estoy de ti
lo feliz que me hace
haberte elegido.

Pero el dolor fue el único hijo
que nuestro amor me dió
y no les puedo decir lo mismo
porque se dan cuenta de mi hipocresía.

Se dan cuenta de que te veo en otras mujeres,
y me duele,
como sólo duelen esas cosas
que son irreparables.

Demasiado tarde, siempre,
porque ya te fuiste,
te fuiste y no te detuve,
te fuiste y no volviste.

Ya no sé quién eres
y para mi mala suerte
no puedo dejar de extrañar a quien fuiste.

Pero ya es tarde,
otros labios te han tocado
tengo asco de tenerte
y resentimiento de volver a verte.

Ah, todo es tarde.
Al igual que la carne
de gusanos se llenan mis poemas.

No me quedas más que en el recuerdo
en la nostalgia
en el anhelo irrealizable
de que todo hubiese sido diferente
en la hermosa vida juntos
que pudimos tener
si no te hubieras ido.

jueves, 16 de mayo de 2019

Ser eternos todavía

Nunca me olvidaré
del amor que te di
de los libros que leímos juntos
ni de las puñaladas en la espalda
que me diste.

Nunca olvidaré el sol que sale cuando ríes
o el aroma a cielo de tus ojos
o la ternura que tienes cuando duermes.

Tal vez te perdone en otra vida,
en la que no te ame tanto,
por ahora sólo quisiera que regreses
y que me dieras tu vida
para perdondarte.

A mí no me vengas a decir
que sufres por mí
yo no hice más que amarte y cuidarte
sufres
por no tener la fuerza para amarme.

Entre todas las sombras de mi pasado,
es la tuya la única con color
la única que brilla
cómo no amarte para siempre
cómo no querer
volver a soñar juntos
cómo pudiste irte
si aquí se te amaba demasiado.

Pero fue la decisión que tomaste,
y ambos tuvimos que vivir con ella.
Ya tú no eres la niña de mis besos,
y ya yo no soy tu dueño, niña mía.

Ojalá que mi recuerdo en tu alma
al igual que a mí
te perturbe para siempre
ojalá que en esa muerte
sí podamos ser eternos todavía.