viernes, 23 de enero de 2015

38 Conociendo a la parcera

Al llegar  de España, una chica me estuvo mandando mensajes de texto. No sé cómo es, pero dice que es amiga de una de mis primas, y que vio mis fotos y le parezco lindo. No he sabido más de la Frentona. La chica misteriosa y yo hablamos todos los días, gastamos mucho dinero en llamadas. No sé cómo puede gustarme alguien que no sé cómo es. Creo que la uso como excusa para no pensar en la Frentona.

Fui a casa de mis primas para conocer a la misteriosa. Mis primas me dijeron que es fea, que la bonita es su hermana. Al parecer le mostraron la foto a su hermana y la misteriosa se enamoró de mí. Estoy estupefacto. De todas formas quise ir a verla, aparecimos de sorpresa en su casa y apareció ella, andana en pijamas, cuando me vio se metió gritando a su casa. Mi prima y yo nos vimos y reímos. Al cabo de unos minutos la chica apareció con un moño raro en la cabeza, hablamos. Es raro cómo una persona que se gasta horas hablando contigo por teléfono, cuando te tiene al frente, no dice nada. Cuando me iba me acompañó a la parada, unas niñas que parecían cucarachas me gritaron cosas: uy papi que bello estás. En mi vida había causado semejante impacto en una mujer, la misteriosa se enojó e iba a ir hasta donde ellas para darles una paliza. Le dije que no peleara y le di un beso. Hemos seguido en contacto por mensajes pero me gusta ahora una chica que conocí en una fiesta, se llama la Malandra. Descubrí que la Misteriosa es fanática de películas de capos, así que todo el tiempo me dice Parce, y yo también a ella. Somos buenos amigos a distancia.

Anoche mi prima y yo estabamos hablando de nuestros primeros besos, dormíamos juntos. Espalda con espalda. Empezaba a sentir su respiración fuerte, sin darnos cuenta nos volteamos y empezamos a besarnos. Me besaba como un perro lamiendo mi boca, pero se sentía bien. Luego me dio una patada muy fuerte y me dijo que no podíamos hacer eso. Fui al otro cuarto y me masturbé, aún me duele la costilla.

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